El clima de la España ibérico-balear depende de su situación en el extremo suroccidental de Europa y de su compleja orografía (gran meseta Central rodeada de montañas y con montañas interiores, gran barrera pirenaica y valle del Ebro bastante cerrado; así como la apertura atlántica de las grandes cuencas del Duero, Tajo, Guadiana y Guadalquivir); las islas Baleares se encuentran en el Mediterráneo occidental cerca de la península ibérica y son relativamente montañosas. Este espacio geográfico está afectado climáticamente por los vientos dominantes provenientes del Atlántico y las borrascas asociadas al frente polar, las altas presiones relacionadas con los anticiclones de las Azores y centroeuropeos, las bajas norteafricanas, la influencia del Mediterráneo y las advecciones de masas de aire frío centroeuropeo y ártico.
Las precipitaciones medias totales anuales en la Península disminuyen, en general, de norte a sur y de oeste a este (mapa 1). Los máximos pluviométricos se presentan en los montes de la Costa da Morte, las Rías Baixas, los montes de Guipúzcoa y los de la vertiente atlántica de Navarra; los mínimos se encuentran en el sureste peninsular (litoral de Almería y Murcia).
Las precipitaciones son más abundantes, en general, en otoño e invierno y escasas en verano (mapa 2 ); en la mayor parte del territorio hay sequía estival y son relativamente frecuentes los chubascos intensos asociados a inestabilidad y la nubosidad convectiva, sobre todo en las regiones mediterráneas y del suroeste peninsular.
Respecto a las temperaturas las más bajas se producen en el mes de enero y las más altas en julio.En invierno, en las zonas de montaña y en el interior peninsular hay frecuentes heladas y se pueden alcanzar temperaturas mínimas muy bajas, tanto los días anticiclónicos con fuerte irradiación nocturna como los días de advecciones frías árticas o centroeuropeas. Independientemente de las altas cumbres,se alcanzan temperaturas invernales muy bajas en valles intramontanos del Pirineo aragones-catalán, del sistema Ibérico y de la vertiente sur de la cordillera Cantábrica (mapa 3 y 4 ).En verano las máximas temperaturas se alcanzan en zonas del centro del valle del guadalquivir y del sur de Extremadura (mapa 5 y 6 ). En el litoral galaico-cantábrico las temperaturas veraniegas son relativamente suaves y la interacción de las brisas marinas con los montes costeros origina algunos días de llovizna; en el litoral mediterráneo e verano se caracteriza por la fuerte insolación,la humedad relativa alta con sensación de bochorno y el largo periodo de sequía, aunque pueden producirse algunas tormentas.
Los factores fundamentales del paisaje vegetal son el clima, el suelo y la geomorfología. La mayor parte de Galicia,la cornisa cantábrica y los Pirineos,pertenecen a la región biogeográfica Eurosiberiana (normalmente sin sequía estival), mientras que el resto de la Península y Baleares pertenecen a la región Mediterránea.
La España eurosiberiana,está dominada por robledales (de carballo y albar),hayedos, abedulares, castañares y, en los pirineos además por coníferas de montaña(abetares y pinares de P.sylvestris y P.uncinata).Algunas de estas formaciones vegetales penetran en el interior peninsular a modo de isleros de ambiente parecido al de la Iberia verde-norteña.El resto de la Península y Baleares pertenece a la región biogeográfica Mediterranea (con sequia estival) que está dominada por bosques esclerofilos (encinares y alcornocales) y pinares (carrasco,piñonero, resinero, laricio).Los bosques dominados por marcescentes (rebollares, quejigares, y algunos castañares) son típicos de la trensición atlántico-mediterránea y aparecen en los ambientes climáticos: supramediterráneo (húmedo y subhúmedo), mesomediterráneo (zonas altas y umbrías) y montano (zonas bajas y solanas), También hay que destacar la presencia de sabinares,de distintas especies,característicos de las parameras continentales o de zonas subesteparias o semiáridas.
En 1987 Salvador Rivas Martínez (Mapa 7) distinguía para cada región biogeográfica unos pisos bioclimáticos, o espacios termoclimáticos (y en ellos subtipos u horizontes) definidos en base a parámetros de temperatura; así como unos tipos de ombroclimas según la precipitación media anual. Con estos pisos bioclimáticos y tipos de ombroclima se relacionan bien algunas comunidades vegetales características de cada región biogeográfica.
En la región Eurosiberiana diferenciaba cuatro pisos bioclimáticos (colino,montano, subalpino y alpino, aunque también sugirió el piso termocolino) y tres tipos de ombroclima (subhúmedo, húmedo e hiperhúmedo). Por otra parte, en la región Mediterránea distinguía seis pisos bioclimáticos (inframediterráneo, termomediterráneo, mesomediterráneo, supramediterráneo, oromediterráneo y crioromediterráneo) y seis tipos de ombroclima (árido, semiárido, seco, subhúmedo, húmedo e hiperhúmedo); de los seis pisos bioclimáticos de la región Mediterránea se encontraban en el territorio ibérico-balear cinco, ya que el inframediterráneo lo restringía al suroeste de Marruecos.
El piso termocolino (colino inferior) se extiende por una estrecha franja costera entre Oporto y Bilbao, en ella junto a restos de caducifolios aparecen de forma dispersa encinares (Quercus ilex subsp. ilex), madroño, laurel e incluso de forma muy localizada acebuche, lentisco y helechos subtropicales. El piso colino se encuentra en las campiñas costeras y zonas basales de las montañas galaico-cantábricas con presencia de carballedas, castañares, bosques mixtos caducifolios, fresnedas y localmente algunos encinares. El piso montano se sitúa entre 500-1700 m de altitud y está representado por hayedos, abedulares, robledales de albares, melojares y, además en los Pirineos, robledales de Quercus humilis, pinares de Pinus sylvestris (con alguna manifestación relicta natural en la cordillera Cantábrica meridional) y abetales. El piso subalpino se encuentra (aproximadamente y dependiendo de la continentalidad y la orientación) en los Pirineos a altitudes entre 1600-2200 m con presencia de abetales y pinares de Pinus uncinata, arándanos, rododendros, brezos, etc., así como en las montañas entre los Ancares y el Alto Campoo a altitudes comprendidas entre 1700-2300 m con matorrales de enebros rastreros, arándanos, brecinas, etc., que alternan con pastizales. Por encima
de los 2200-2300 m en las montañas de toda la región Eurosiberiana se encuentra el piso alpino caracterizado por pastizales de alta montaña o “de puerto”.
El piso termomediterráneo incluye la estrecha franja costera mediterránea al sur de Barcelona, el litoral gaditano-onubense, el valle del Guadalquivir y zonas de poca altitud de Baleares, con un paisaje de coscojas, encinas, alcornoques, acebuches, algarrobos, lentiscos, palmitos, etc. El piso mesomediterráneo se encuentra en la meseta Sur (salvo en las montañas), el valle del Ebro, algunas zonas térmicas del oeste de la meseta Norte, la cuenca media-baja del Sil y en zonas de mayor altitud de Baleares; en él son típicos los encinares, alcornocales, coscojares, melojares y quejigares. El piso supramediterráneo es el del piedemonte sur del sistema Central, la meseta Norte, las montañas Penibéticas, los Montes de Toledo, sierra de las Villuercas, el sistema Ibérico, el Prepirineo, zonas del sureste de Galicia y montañas de la mitad sur; caracterizado por melojares, encinares, sabinares albares, castañares y hayedos (algunos relictos). El piso oromediterráneo se localiza en las montañas más elevadas del interior peninsular y presenta pinares de pino silvestre y piornales. En el piso crioromediterráneo se localizan los pastos de la alta montaña mediterránea.
En la actualidad se acepta en España el piso inframediterráneo de ombroclima subárido-árido. Este aparece localmente en una franja estrecha del litoral entre los cabos de Gata y Palos.
Artículo de la publicación en línea de la Agencia Estatal de Meteorología “Selección de especies de interés fenológico en la península ibérica e islas Baleares”