El clima en València en la semana fallera, del 15 al 19 de marzo (1938-2020)

Por José Angel Núñez, D.T. de AEMET en la Comunidad Valenciana

Nunca olvidaremos la semana del 15 al 19 de marzo de 2020, ni las de este 2021, semanas tradicionales de fiesta en València pero sin fiesta. ¿Quién se acuerda del tiempo que hizo durante las fallas de 2020, cuando el día que debía ser de la plantá de los monumentos se convirtió en el primer día completo del Estado de Alarma decretado por el Gobierno de España el día anterior? Poco importa seguramente el tiempo que hizo ahora hace un año cuando no hubo fiesta y, además, teníamos que permanecer confinados en casa, pero si tuviésemos que elegir una sola palabra para calificar el tiempo de la semana de fallas 2020 emplearíamos la palabra “sombría”, literalmente sombría, además de metafóricamente sombría.

La semana de fallas marca el final del invierno y el principio de la primavera y eso se nota en el clima de la ciudad de València, sobre todo porque con la primavera va cesando la influencia de los vientos terrales, que son los más frecuentes en el invierno, y comienza a sentirse la influencia del Mediterráneo que se prolongará hasta bien entrado el otoño. Raras son las fallas en las que no luzcan días espléndidos.

El tiempo de la semana que tuvo que ser de las fiestas de fallas 2020 fue triste, como los acontecimientos que se iban sucediendo esos días. El calificativo de sombría que le hemos atribuido antes no es gratuito, ya que fue una semana muy nubosa, con escasa insolación y con precipitaciones. De hecho, el número de horas de sol que se registraron entre el 15 y el 19 de marzo de 2020 fue sólo de 13.1 en el observatorio de València (imagen 1), cuando lo normal son casi 38 horas.  Fue la semana fallera con el número de horas de sol más bajo en décadas. Desde 1938, cuando comenzó a registrarse la insolación en València, sólo durante las fallas de 1953 hubo menos horas de sol que durante las de 2020.

Imagen 1: nº de horas de sol en el observatorio de València en el periodo del 15 al 19 de marzo

Toda la Comunitat Valenciana (sobre todo la provincia de Valencia, Castellón y norte de Alicante, zonas con localidades tradicionalmente falleras), tuvo muy poca insolación durante la semana de fallas 2020 (imagen 2). En promedio, en la provincia de Valencia hubo un 60% menos de horas de sol y un 55% en la de Castellón. Esa situación de poca insolación se prolongó durante el resto del mes de marzo y prácticamente todo abril, de forma que la primavera 2020 fue la de menos horas de sol en la Comunitat Valenciana desde el inicio de la serie de estimaciones de insolación a través de datos de satélite en 1983.


Imagen 2: insolación estimada. Total de horas de sol acumuladas entre el 15 y el 19 de marzo de 2020. Fuente de datos para la elaboración del mapa: CM SAF (EUMETSAT).

El día 15 comenzó la nubosidad a invadir nuestro territorio y el lunes 16 se formó una DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) en el interior peninsular (imagen 3) al tiempo que en superficie se desarrolló una zona de bajas presiones entre el norte de Argelia y el sureste de la Península, de forma que se fueron intensificando los vientos húmedos de componente este sobre la mitad norte de la Comunitat, lo que dio lugar a precipitaciones que llegaron a ser fuertes y persistentes en zonas de Castellón y del norte de Valencia.

Imagen 3: imagen de masas de aire del 17 de marzo de 2020 a las 09:15 UTC mostrando la DANA en el suroeste de la Península y abundante nubosidad en la mitad norte de la Comunitat Valenciana.

Con esta situación meteorológica, los días 16, 17 y 18 permanecieron prácticamente con el cielo cubierto y en el que debía ser el día grande de la fiesta, el 19, sólo en las horas centrales del día se pudo ver tímidamente el sol durante un par de horas.

Ese día, aprovechando la luz que había faltado durante la semana de fiesta y la pausa temporal en las precipitaciones (que se intensificarían las siguientes semanas), miles de músicos valencianos salieron a los balcones y nos ofrecieron un concierto irrepetible que aún se puede recordar a través de los sonidos guardados en las redes sociales con el hashtag #FestivalDelsBalcons, aquí os dejamos algunos ejemplos.

Volviendo a la meteorología, a las nubes y a la penumbra, a continuación adjuntamos las imágenes del número diario de horas de sol en Europa occidental estimadas a través de datos de satélite entre los días 15 y 19 de marzo de 2019, donde se comprueba la escasa insolación que hubo durante las fallas de 2020 en nuestro territorio (imágenes 4, 5, 6, 7 y 8).

Imagen 6: insolación total diaria en horas el 19 de marzo de 2020. Fuente de datos para la elaboración del mapa: CM SAF (EUMETSAT).

Con tanta nubosidad, los días fueron muy fríos durante la semana de fallas 2020, en promedio 2.5 ºC más fríos que el promedio de la serie 1938-2020, pero por el mismo motivo, por la abundante nubosidad, las noches fueron muy cálidas, 3.2 ºC por encima de la media, por lo que al final el carácter térmico de las fallas 2020 fue normal (imagen 7).

Imagen 7: temperatura máxima, mínima durante la semana de fallas de 2020 y valores normales.

Durante la semana de fallas 2020 llovió 3 días y se acumularon 19.8 l/m2, de forma que fue la semana fallera de más precipitación acumulada desde el año 2000 y la tercera de la serie, tras 1989 y 2000.

Este mes de marzo de 2021 tampoco habrá fallas, pero para seguir con la tradición que desde hace años llevamos a cabo desde esta Delegación, adjuntamos unos breves apuntes con la climatología de la semana de fallas actualizada hasta el año pasado.

TEMPERATURA

Aunque el inicio de la primavera está caracterizado por una gran variabilidad atmosférica y suele ser habitual que a días relativamente frescos le sucedan otros cálidos, hay un patrón que se suele repetir con mucha frecuencia en la semana de fallas en la ciudad y que popularmente es conocido como “tiempo fallero”: con la llegada de la primavera y en días estables, a partir de mediodía se establece el típico régimen de brisas, que cuando es el predominante en esta semana de fiestas, da lugar a que las temperaturas diurnas más altas tomen valores próximos a 20 ºC, mientras que las mínimas se quedan alrededor de 10 ºC.

Valores medios de temperatura en los últimos 83 años:

  • Media de las máximas (temperatura diurna):    19.1 ºC
  • Media de las mínimas (temperatura nocturna):     8.9 ºC
  • Media diaria:                                                        14.0 ºC 

Semanas falleras con medias diarias más cálidas en los últimos 83 años:

  • 1988, con 19.1 ºC, 5.1 ºC por encima de la media diaria.
  • 1969, con 18.6 ºC, 4.6 ºC por encima de la media diaria.
  • En la actual década, las fallas más cálidas fueron las de 2014, con una media más de 2 ºC superior a la media del periodo de 83 años.

Semanas falleras con medias diarias más frías en los últimos 83 años:

  • 1973, con 9.2 ºC, 4.8 ºC por debajo de la media diaria.
  • 1953, con 10.0 ºC, 4.0 ºC por debajo de la media diaria.
  • En años más recientes, las fallas de 2010 y 2015 fueron muy frías, con una media de unos 11.5 ºC que es aproximadamente 2.5 ºC por debajo del promedio del periodo de 83 años analizado.

Días más cálidos en la semana fallera:

  • 19 de marzo de 1940, con 30.8 ºC de temperatura máxima.
  • 17 de marzo de 2019, con 29.8 ºC de temperatura máxima.

Noches más frías en la semana fallera:

  • 15 de marzo de 1962, con 2.0 ºC de temperatura mínima.
  • 19 de marzo de 1939, con 3.0 ºC de temperatura mínima.
  • En años más recientes destaca la nit del foc (del 18 al 19 de marzo) de 2003, cuando los termómetros bajaron hasta 4 ºC, pero también en el año 2015 hubo noches frías en la semana fallera y, a la hora de la cremà del año 2018, la temperatura era la más baja desde 1949.


PRECIPITACIONES

En cuanto a la lluvia, y como pasaba con la temperatura, hay una gran variabilidad entre unos años y otros. Casi en la mitad de los años analizados (40 de 83) no hubo ningún día con lluvia apreciable en la semana de fallas en la ciudad. En un 32% de los años (26 de 83) llovió un día de forma apreciable; en un 12% llovió dos días (10 de 83); en un 6%, entre ellos el pasado 2020, llegó a llover 3 días (6 de 83), y sólo en las fallas de 2015, hace seis años, se registró lluvia apreciable en la ciudad en 4 de los 5 días de la semana fallera.

Uno de los años más recordados debido al mal tiempo fue 2015, cuando un flujo de viento fuerte de levante generó nubosidad, con precipitaciones que, aunque durante los días festivos no fueron muy importantes (posteriormente a partir del 20 se intensificarían y generalizarían), sí que dio lugar a un tiempo muy “inseguro”.

VIENTO

Como se ha comentado, en las fechas en las que se celebran las fallas los vientos predominantes suelen ser las brisas. Cuando se da esta circunstancia atmosférica, los cielos suelen estar poco nubosos y la temperatura a mediodía queda alrededor de 20 ºC. La sensación en los días de brisa es de ambiente fresco por la tarde debido a que este viento, en los últimos días del invierno, se desliza sobre un mar Mediterráneo relativamente frío, a 14 ºC de media, y aunque la temperatura sube de forma continua desde primera hora de la mañana, a mediodía, con la llegada de la brisa, se estabiliza en valores próximos a 20 ºC.

Esta brisa de mar se refuerza a partir de mediodía, por lo que en los barrios marítimos o en zonas abiertas de la ciudad, a partir de la hora de la mascletà y durante la tarde, el ambiente queda fresco, aunque la estructura urbana da lugar a que en el centro de València estas brisas de mar débiles queden prácticamente inhibidas.

Pero no todo son días de brisas, hay años como el 2018 en los que las circulaciones de viento de poniente son predominantes. En 2018 el viento de poniente no cesó y las rachas de viento en horas centrales del día llegaron a superar los 50 km/h, mientras que el pasado 2020 el viento predominante durante más de dos terceras partes del periodo fue de norte y nordeste.

INSOLACIÓN

Las fallas marcan el final del invierno y el comienzo de la primavera y, por tanto, coindicen con la época del año en que la duración del día y de la noche se iguala. Al estar cerca del equinoccio, la insolación máxima teórica en los 5 días de la semana fallera, debería de estar entre 50 y 60 horas (12 horas diarias por 5 días). Pero por la precisión de los aparatos de medida de la insolación, y porque realmente la semana fallera se celebra días antes del equinoccio, resulta raro que se superen las 50 horas de insolación en esos 5 días de fiesta. En promedio, lo normal es una insolación media diaria 7 horas y media, para un total en los 5 días de fiesta de 37 horas y media.

El año en el que la semana fallera tuvo mayor número de horas de sol fue 1998, con 53.7 horas en total, lo que da un promedio de 10 horas y 45 minutos de sol diario. Los años que menos horas de sol hubo fueron 1953 y el pasado 2020, con sólo 11 horas y media y 13.1 horas, respectivamente.

València a 17 de marzo de 2021

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