
En el marco de EUMETNET, organización cuyo objetivo es facilitar la cooperación entre los Servicios Meteorológicos Nacionales (SMHN) europeos, y en coordinación con Météo-France (Francia) e IPMA (Portugal), AEMET empezó a nombrar en diciembre de 2017 las borrascas que podrían afectar con gran impacto al suroeste europeo. Un grupo similar, encabezado Met Office (Reino Unido) y Met Éireann (Irlanda), nombra a las borrascas con alto impacto en el oeste del continente.
Una borrasca es un sistema de bajas presiones típico de latitudes medias. Como en años anteriores, las borrascas que se nombren serán solo las que se profundicen tanto que puedan producir un gran impacto en bienes y personas. El objetivo es favorecer la comunicación de los episodios de tiempo adverso. Las encuestas en Reino Unido e Irlanda demostraron que la población estaba más atenta a los avisos previstos de fenómenos meteorológicos adversos y a las recomendaciones de seguridad cuando la amenaza estaba claramente identificada y asociada al nombre de la borrasca.
Las borrascas más profundas suelen llevar asociados no solo vientos más fuertes, sino también sistemas nubosos más activos, cuyas precipitaciones también pueden tener efectos adversos. El criterio para nombrar una depresión se basa en el viento esperado: El primer servicio meteorológico que prevea emitir avisos de viento de nivel naranja o rojo dará nombre a la borrasca, siguiendo, por orden alfabético, la siguiente lista acordada en el Grupo Suroeste para la temporada 2020-21, e informará al resto de países (tanto del Grupo Suroeste como del Grupo Oeste), de modo que, una vez que en un país se nombre a una borrasca, los demás paises, tanto del grupo Oeste como del grupo Suroeste, mantendrán ese nombre:
Alex Barbara Clement Dora Ernest Filomena Gaetan Hortense Ignacio Justine Karim Lola Mathieu Nadia Octave Paula Rodrigo Sofía Tristan Viviane Walter
La temporada 20-21 dará comienzo el próximo 1 de octubre. ¿Hasta qué nombre llegaremos? Se admiten apuestas. Lo importante, no obstante, es que los posibles “bautizos” sirvan para su cometido de prevenir a la población y a las autoridades y de proteger vidas y bienes, que es la misión fundamental de cualquier servicio meteorológico nacional.
hasta Karim