Isla de calor urbana, sensación térmica y humedad relativa

rsthst

Por Andrés Pinar Solé, alumno en prácticas en el Área de Información meteorológica y climatológica.

Agencia Estatal de Meteorología (Aemet)

¿Quién dijo que habíamos de viajar a una isla caribeña para disfrutar en verano? Si vives en una ciudad también tienes la oportunidad de sudar efusivamente gracias a las islas de calor urbanas que explicaremos a continuación.

Es un fenómeno comprobado por meteorólogos, climatólogos y por la propia gente de a pie que en las ciudades hace más calor, al menos relativamente a la zona no urbanizada que las circunda, especialmente durante la noche. Esto se debe a un conjunto de condiciones más o menos comunes en las ciudades de interior.

 

dyhjdrt

Termograma de Baltimore

 

En primer lugar, y como ya explicamos en el artículo sobre la humedad del aire (https://aemetblog.es/2017/08/10/por-que-el-aire-caliente-puede-contener-mas-vapor-que-el-frio/), la evaporación del agua permite regular la temperatura. Imaginemos una superficie mojada; en cuestión de poco tiempo esta superficie transmitirá parte de su energía térmica en forma de calor al agua que la impregna hasta alcanzar el equilibrio térmico. Si aumenta la temperatura del agua, se evaporan más moléculas que portan energía, haciendo que la temperatura del agua disminuya y, de nuevo, se alcance un equilibrio térmico entre la superficie y el agua enfriada, dando lugar a un enfriamiento de la superficie que originalmente estaba caliente.

 

stfgrtg

Niebla en la ciudad

 

Este mecanismo de regulación es el que provoca el sudor sobre nuestra piel, y también ocurre sobre el suelo cuando está húmedo. En las ciudades, forradas de baldosas, pavimento y asfalto impermeables, la escorrentía hace casi imposible la penetración del agua hacia el subsuelo, de manera que esta permanece en la superficie, templando el ambiente y a su vez humedeciéndolo. Luego volveremos sobre este punto espinoso, porque más humedad no implica más temperatura aunque sudemos más.

Otro de los factores responsables del calentamiento local en las ciudades son los tejados cerámicos y las calles asfaltadas: por su color y composición, estos materiales absorben toda la luz y retienen el calor, reduciendo notablemente el albedo de las ciudades (es decir, la luz incidente no es reflejada). Algunas soluciones a esta acumulación de radiación podrían implicar más zonas verdes en las ciudades y creación de tejados verdes que palien la absorción.

 

sdfghsfg

Radiación sobre la ciudad

 

¿Cómo es posible que plantando árboles y plantas bajemos la temperatura de las ciudades? Sencillamente, las plantas absorben la radiación pero no la acumulan ni la radian de nuevo, sino que la utilizan para sus propios fines, además de aportar sombra y condensar el agua de su entorno, de manera que la humedad del aire disminuye en favor de la humedad del terreno, lo que favorece la proliferación de más plantas…Como decía el sabio Fukuoka, “las plantas llaman a las plantas”, y en los bosques se está bien fresquito…

 

srtghshdsrt

Tejados verdes

 

Por último, la contaminación, polución y bolsas de humo encima de las ciudades crean efecto invernadero de manera notable, aparte de calentar la atmósfera con sus altas temperaturas. El viento está menos presente en el interior de las ciudades, permitiendo a los gases permanecer más tiempo.

Todas estas consideraciones son válidas, como indicamos anteriormente, en una ciudad de interior sin grandes masas de agua cercanas, donde la temperatura puede ser hasta 10 grados centígrados más alta que en sus campos aledaños. En una ciudad marítima o rivereña, las condiciones pueden cambiar y el fenómeno de isla de calor urbana es diferente.

 

lk-lk

Perfil de temperatura

 

Ahora bien, muchas veces juzgamos la temperatura sin tener un termómetro en la mano, dejándonos llevar por la sensación térmica, lo cual es bastante subjetivo. Percibimos la temperatura por medio de los receptores de nuestra piel, por ende, el sudor marca la pauta. Como se explicaba más arriba, el sudor regula la temperatura de la piel, sin embargo, la humedad del ambiente puede intervenir haciendo que la función del sudor se vea afectada.

Antes de aclarar este punto, es necesario familiarizarnos con el concepto de humedad relativa, que no es más que la cantidad de vapor que contiene el aire respecto a la que podría contener cuando está completamente saturado. Ya sabemos que el aire puede alojar una cantidad determinada de vapor dependiendo de su temperatura (más vapor cuanta más temperatura), pero no siempre el aire contiene todo el vapor que podría. Esta cantidad sería la humedad relativa. Una humedad relativa del 50% implica que el aire contiene la mitad del vapor posible a una temperatura fija.

 

hsfghfgdf

Humedad relativa

En ambientes fríos aumenta la humedad relativa al disminuir la capacidad de retener vapor del aire, y ocurre lo contrario en lugares cálidos. ¿Por qué tenemos más sensación de calor en Valencia que en Albacete, si sus temperaturas son más bajas? En la costa la temperatura es más suave, hace falta menos vapor para obtener grandes humedades relativas, y con la proximidad con el mar ésta se dispara, provocándonos sensación de calor día y noche. En el interior, en las zonas secas, aun superando los 40 grados la humedad es tan leve que sentándonos a la sombra la sensación de calor desaparece.

 

gergdfgsdr

Cantidad de vapor que el aire puede contener según la temperatura

 

El aire humedecido con una gran humedad relativa dificulta la evaporación del sudor, y nos hace falta sudar mucho más para conseguir regular la temperatura de la piel (a no ser que sople el viento, en este caso apenas hace falta sudor). Así pues, la comodidad humana no se rige por la temperatura ambiental, sino por el índice de humedad relativa y la aparición o no de viento.

Bibliografía:

Imágenes:

 

Acerca de aemetblog

La Agencia Estatal de Meteorología sucedió en 2008 a la entonces Dirección General del Instituto Nacional de Meteorología, con más de 150 años de historia. Actualmente está adscrita, según el artículo 4.4 del Real Decreto 864/2018, de 13 de julio, por el que se desarrolla la estructura orgánica básica del Ministerio para la Transición Ecológica, a ese departamento ministerial a través de la Secretaría de Estado de Medio Ambiente. El objeto de AEMET, según el artículo 1.3 del Real Decreto 186/2008, de 8 de febrero por el que se aprueba su Estatuto, es el desarrollo, implantación, y prestación de los servicios meteorológicos de competencia del Estado y el apoyo al ejercicio de otras políticas públicas y actividades privadas, contribuyendo a la seguridad de personas y bienes, y al bienestar y desarrollo sostenible de la sociedad española". Como Servicio Meteorológico Nacional y Autoridad Meteorológica del Estado, el objetivo básico de AEMET es contribuir a la protección de vidas y bienes a través de la adecuada predicción y vigilancia de fenómenos meteorológicos adversos y como soporte a las actividades sociales y económicas en España mediante la prestación de servicios meteorológicos de calidad. Se responsabiliza de la planificación, dirección, desarrollo y coordinación de actividades meteorológicas de cualquier naturaleza en el ámbito estatal, así como la representación de éste en organismos y ámbitos internacionales relacionados con la Meteorología.
Esta entrada ha sido publicada en ENTENDER LA METEOROLOGÍA y etiquetada como , , . Guarda el enlace permanente.

1 respuesta a Isla de calor urbana, sensación térmica y humedad relativa

  1. Pingback: Agua y fuego | El Quicio de la Mancebía [EQM]

Deja un comentario